BienLlegad@s a casa

Al igual que al principio del mes de agosto te deseaba las mejores vacaciones, prudencia y disfrutar a tope estos días de "relajo", aunque parezca mentira, estos treinta y un días han pasado, seguro, como un suspiro y aún estas alucinando e intentando recontar los días, por si acaso te has perdido alguno... Todavía recuerdas aquel último día, a la salida del trabajo, despidiendo a los compañeros entre deseos sinceros de descanso, diversión y aventuras, la sensación de victoria por llegar a ese momento, después de un crudo año y, seguro, disfrutaste hasta de los atascos, consciente de que no tenías prisas con todo un mes por delante y muchas ganas de disfrutar. Incluso, tu al igual que yo, seguro, también te cruzaste con algún retornado de sus propias vacaciones y sin ánimo revanchista, le dedicarías una mueca de comprensión.

Aquel primer día de agosto, con todo un mes por delante, ya pasó y, ahora, eres afortunado y tienes un trabajo al que regresar, una familia y amigos a los que contar los recuerdos de tantos días, intentando ya de paso, refrescarte con aquel aire de la sierra, sentir el calor del sol playero o saborear de nuevo aquel momento entre sardinas asadas, sangrías, risas y mucho relajo, sin prisas.

Ahora, ya en casa, me permitirás darte la bienvenida a tu hogar, entre los tuyos pero, sobre todo, felicitarte por no ser uno de los números estadísticos de Tráfico que cada año dejan su vida y todo cuanto eran y tenían bajo una lámina dorada, ocultándolos al mundo de los vivos, desperdigados por el asfalto entre la huellas de frenazos, guantes ensangrentados y restos sanitarios (que por cierto, no entiendo porque siempre dejan esos desperdicios después de sus actuaciones y encima los tengamos que ver por la televisión en cualquiera de las noticias). Tu, ya estas en casa, has regresado a tu hogar y solo por eso ya mereces comenzar a pensar en las próximas vacaciones, sin dejar de concienciarte en ese regreso al trabajo, los compañeros (ellos y ellas) y que gracias a esas horas pesadas de trabajo, el año próximo o incluso antes, podrás disfrutar de unas nuevas y muy merecidas vacaciones.

Lo dicho. Bienvenid@ y a disfrutar ahora de la fortuna por tu puesto de trabajo... Seguro que a mi, esto último, me tocará pronto... Seguro!