¿Me cuentas un cuento? Me preguntó una vez la hija pequeña de una conocida, que no amiga. Tengo que reconocer que no soy demasiado bueno guardando en la memoria los cuentos, historias o chistes, así que preferí inventarme uno sobre la marcha, cosa fácil en aquel caso mirando la cara angelical de aquella criatura de ojos enormes, mirada pícara y sonrisa traviesa. Así que en unos segundos comencé a inventarme un cuento que surgía hilando frases mientras recorría con la mirada la habitación, con disimulo.
Al final, tengo que reconocerlo, aquella historia me sorprendió hasta a mi lamentando únicamente no ser capaz de recordarla tal cual se la conté, aunque si recuerdo haberme ganado los favores de aquella madre agradecida por haber sido capaz de “apaciguar a la fiera de la casa” y algunos detalles del resto de la velada, que presumo resultó de lo mas agradable. Eso si, me negué a seguir contando historias a los adultos, papas de la niña incluidos, por razones mas que obvias. Llegué a imaginarlos a todos, mi acompañante incluida, dormitando tras finalizar mi relato, a tenor del resultado con la pequeña.
Han pasado algunos años desde aquella velada y esta misma tarde me he encontrado con esta familia que, para mi sorpresa, me han recordado aquella velada, lo bien que lo habían pasado e incluso su hija, la protagonista de ese cuento, desde aquella noche, no había cejado en su empeño de leer cuanto caía entre sus manos llegando a recriminarles cuando, por sus obligaciones en casa, les pedían dejase eso para mas tarde, respondiendo, “eso y terminar como Risueña, la del cuento de Juan”. Nunca sabré si con ese último comentario me recriminaban el cuento y sus efectos secundarios o simplemente era eso, un comentario. Nunca valoraremos el poder de un cuento.
2 comentarios:
Por lo que leo, escribes mejor que vives, pero si lograras amueblar un poco mejor tu cabeza, mejorarias tus escritos y por supuesto tu vida.
El ego (egocentrismo, egoismo, egolatria, egotismo) no es buén camino para la felicidad.
Es mas facil todo, no lo compliques.
Garcias, lo tendré en cuenta
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