por fin el final...y, ahora que

No te asustes. Digo el final del curso de soldaduras que finalizamos esta misma jornada con el “examen de homologación”...-mejor esperar el resultado del técnico, que deberá pasar la pieza por rayos x y, aunque pudo quedar mejor eso del “peinado”, después de una penetración casi perfecta y un relleno que, como dijo Antonio, uno de los monitores, “el mejor de los míos” para ya veremos...-, mañana martes, con el broche del mismo curso, sin oros ni mas metales preciosos que la satisfacción por lo aprendido, lo superado y todo cuanto seamos capaces de valorar.

Joder... Tanta historia para decir que se acabo o que se daba y, a partir de ahora, a buscarse la vida o, mejor dicho, a buscarse el curro, el tajo, ocupación remunerada o forma alguna de ingresos dinerarios para garantizar los garbanzos, el techo y, como no, satisfacer las necesidades nacionales a través de los impuestos –aunque estos ya los restan de lo que abonan por desempleo...-.

Vaya putada esto de “mi eslabón perdido”... Es casi como pertenecer a una casta de la que solo se acuerdan sus miembros y para jodernos de alguna manera.

Coño, cantamos al sol mañanero, rezamos rosarios de castigo, recibimos las primeras vacunas y aún tenemos “la marca”...iniciamos democracias, al final, para el disfrute de unos pocos y alegría de los mas simples... Hicimos “la mili” por cojones y por ser españoles, dispuestos a dar nuestra sangre por su Patria... Descubrimos aquello del divorcio, muchos en carnes propias, aún hoy, puteados por “la mas justa ciega” y por las otras... Muchos descubrieron unas formas nuevas de viajar, sin salir de su cuelgue, y muchos ya, descolgados para siempre... Corrimos delante de los últimos “Armadas” y ahora las siguen armando otros... Izamos nuevas banderas, renombramos sentimientos, descubrimos nuevas patrias, cantamos con Víctor Jara, gritamos con Jarcha y bailamos entre juegos... Aprendimos otras geografías, medimos con otros metros, corrimos por otras causas y reímos por la prohibición de llorar...

Ahora, estas gentes, “los de mi quinta” no podemos mas que esperar que a estos que mandan ahora se les pase la fiebre de su memoria, de esa su historia, tan fresca ahora como nunca, que parecen no dejarnos olvidar –regresan las políticas del miedo, el hombre del saco y el castigo del infierno- y esperar que otros, igual que los anteriores no nos engañemos, “nos saquen a la luz de la oportunidad” para borrar con nuestra memoria la de los otros y, por fin, se reconozca nuestro paso por esta España de ayer, la de los otros, la de ellos... Joder, que panorama!... Mejor me callo que eso de “el libre pensamiento” sigue estando tan medido y atado como siempre, como antes...

Pues lo dicho... “A joderse toca como antaño ya tocaba. Si eras del pueblo, por eso y si nos, por su madre patria” ;-)

PD: Esto...que solo quería decir que ese curso se acabo pero, mientras tengamos salud, seguiremos aprendiendo!...coñooooo que me pierdooooo!