Cansado de estar cansado

Cansado, a mis 50 años y después de años cumpliendo con todo cuanto se supone debemos cumplir los ciudadanos, desde el Servicio Militar hasta el pago de los impuestos debidos, la educación debida y "mamada" en la educación recibida de mis padres. Cumpliendo con todo cuanto he tenido que cumplir, por narices, por el rigor de la norma o la vara de la ley, que no de la justicia. Siempre siendo el responsable con la responsabilidad a cuestas, sin malos modos, sin perder las formas, aguantando lo indecible y soportando hasta lo que me avergüenza recordar... y, sabes que? Ya está bien de agachar el morro y aguantar la vara!

Cansado de aguantar la falta de respeto de muchos de los mismo ciudadanos que han perdido hasta el respeto por ellos mismos, trasladando su frustración a todo el que les responde con una sonrisa o una simple disculpa, a pesar de todo.

Cansado de tanto vividor que sigue viviendo de la teta ajena, a costa de un trabajo que nunca hacen y solo sudando en espera del recuento de nuestros votos, para, nada mas, olvidar el sudor sudado y volver a su buena vida sin hacer otra que lo que sus partidos les manda hacer. Sin que tan siquiera eso, lo poco que hacen, pueda redundar en mejorar ni un ápice mi vida ni la de mi hija. Políticos de profesión que solo viven para vivir sus propias vidas sin importarles un carajo otra que no sean ellos mismos, sus muchos círculos cercanos y todo aquel que sea capaz de
devolverles el favor. Siempre los mismos, los mismos nombres que resuenan en los medios una y otra vez, ya casi aprendidos de memoria. Cansado de que tan pocos no hagan nada por tantos que, después de todo, hemos permitido que sigan con su estatus.

Cansado de tantos revolucionarios de pacotilla a los que pronto se les acaba la cuerda y la reivindicación de moda, a gritos gritados desde quien sabe donde, sin saber muy bien para quien gritan ni quién les manda gritar, solo poniendo la mano a final de campaña, hasta la próxima
piojada. Cansado de tanto nacionalista salva patrias y sus castillos de naipes que solo ellos saben jugar, gritando siempre en contra de los más gritado, llamando la atención sobre un capote de mentira al que, siempre, algún otro descerebrado acabará por arrancar enganchando los cuernos sin lograr ni siquiera que el olé del respetable.

Cansado de esta administración deshumanizada a pesar de trabajarla tanta persona que ya perdieron el recuerdo de sus pasos por esas mismas "ventanillas", aplaudiendo sus normas en contra incluso de sus propias reivindicaciones cuando acuden "a otras ventanillas" y no reciben otro trato que el que ellos dispensan. Cansado de estar cansado esperando respuesta olvidadas, gestiones realizadas, documentos presentados, esa cita repetida, esas ayudas rogadas formalmente en impreso de curso legal. Cansado de recibir la misma respuesta, por la falta de
presupuesto, por ser un tema ajeno a ellos, y al otro y al de la mesa de al lado. Cansado de los malos modos de esos guardias de la nada en busca de puntos extras para hacerse notar. Que bien cierto resulta, después de tratar con ellos, después de recibir sus malos modos, que hasta un mono se siente alguien cuando le vistes de uniforme.

Cansado de hacer cursos para nada, de estudiar para nada, de correr de un lado a otro, para nada, de presentar curriculums para nada, de recibir siempre la misma respuesta sobre los años, demasiados, para unos y, por poca experiencia para los otros. Cansado de hacer caso a esos
mismos que trabajan sentados tras una mesa prestada a cambio de decirme siempre lo mismo sin hacer nada para evitar mi cansancio de tanto oírles lo mismo, una y otra vez. "Que tanta experiencia la tengo que hacer valer", "que tanto trabajo tiene que servir" "que seguro si hago esto o aquello"... para acabar, una vez mas, de tanto esperar, cansado.

Cansado de este pueblo miserable que solo se mueve cuando le toca de cerca, cuando tocan su cartera, cuando les duele sus carnes, apartando incluso la mirada a aquel que antes cercano, ahora lleva la etiqueta de necesitar, aunque solo sea, hablar con alguien. Un pueblo este, una
nación esta, repleta de cachos de carne dispuestos a salvar su propio culo, sin importar otra que el suyo, ni consciencia de que acaso el próximo sea el mismo, o sus hijos, o sus padres los que acaban tan cansados como yo ahora.

Cansado de tan poco descanso, de no poder descansar, dejándome llevar poco a poco por la impotencia y la rabia muda, sin ser ya capaz ni de llorar por esa misma rabia, ni de pena ni de cansancio, sentado frente a una pared sobre la que ya solo proyecto recuerdos con los que solo
consigo cansarme de tanto recordar para volver a lo mismo... Cansado de mentir a mi padre para no empeorar su estado. Cansado de no atreverme a hablar con lo que queda de mi madre siempre con su muñeco en brazos, los mismos brazos que un día me abrazaron a mi. Cansado de no poder hablarlo, ni gritarlo ni dejar de estar, Cansado!!