Otra melodia

La magia de otro sonido me ha sacado de este estado cuasi de letargo en el que me había sumido por la cantinela de marras. El sonio de tu voz, la sintonía de tus palabras, el timbre de tu risa ha logrado, como un salvavidas, zafarme del temporal de estos días.

Hace unos pocos minutos hemos dejado de hablar y aún resuenas en mi mente, palpitas en mi pecho, animas el ritmo de mi corazón, te lo prometo cansado por tanto traspiés, por tanto portazo, por tanta indiferencia después de tanto con tantos.

Pero no quiero perderme entre mis típicas letrerías y fraserías, solo pretendo decirte que gracias, por oírme, por escucharme, por estar, por ser, por todo cuanto se refiere a ti, mil millones de millones de veces, gracias. A pesar de la novedad de tanto sentimiento para mis sentidos, a estas alturas, gracias por no dejarme caer y mantenerte a mi lado, a pesar de los tropecientos mil kilómetros que nos separan, físicamente.

Joder, a estas alturas y tras esta experiencia no entiendo a ese de la canción sobre la distancia y los sentimientos... Igual era sordo, no existían los teléfonos o, simplemente, no sentía lo que decía sentir. Que Te Quiero, Tu... Y gracias...