Sin saber esperando que cosa, a quién o que caso, si se que espero sin desesperar, convencido que llegará y abierto a todo tipo de sorpresas, dispuesto a todo tipo de sobresaltos y seguro, muy seguro, de superar el trance.
Quien sabe. Quizás vaya a acertar los números de cualquiera de los sorteos –que no será por sorteos- y a partir de un día de estos pueda dejar de preocuparme por llegar erguido a final de mes e, incluso, comenzar a escribir mi carta a los Reyes Magos. O puede que reciba una carta –recuerdas? Con cartero, sobre y sello- de alguna lejana, en el tiempo o el espacio, amistad en la que me anuncia buenas nuevas. Puede incluso que se trate de alguna mala noticia, algún mal de cualquier tipo de mal, según conocemos eso del mal y puede ser desde una multa hasta quien sabe que...
Sea como fuere así es esto de vivir cada día, -digo yo por decir algo- con una nueva luz cada uno de ellos y mas o menos sombras, brillos, oscuridades y resplandores. -Joder que cursi- Ansina que por estos lares me encuentro y espero, junto a La Costilla, sin desesperar y con los brazos abiertos, eso si, dispuesto para cerrarlos a la mínima de cambio... Por si acaso tu!!
1 comentario:
quien espera, desespera... asi que mejor no esperar y salir a buscar lo que quieres, a ver si tienes la suerte de encontrarlo.
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